- 700g de carne de segunda para guisar (morcillo, aleta, carrilleras o rabo sin hueso)
- 1 zanahoria grande
- 150g de guisantes frescos desgranados
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 vaso (100ml) de vino blanco
- Harina
- Aceite de oliva virgen extra
- 1 rama de tomillo fresco o seco
- 1 hoja de laurel
- Pimenta negra
- Sal
Crock-pot:
- 6 Horas en BAJA
Preparación:
- Corta la carne en dados –puedes pedir en la carnicería que te la corten para guisar– y salpimienta.
- Enharina la carne ligeramente y elimina la harina sobrante (puedes hacerlo colocándola sobre un colador y sacudiéndola).
- Dora la carne en una sartén con aceite de oliva.
- Pica la cebolla muy fina y pela los ajos.
- Pela la zanahoria y córtala en rodajas.
- Añade los ajos enteros y la cebolla picada a la sartén hasta que ésta empiece a verse transparente. Baña la carne y la cebolla con el vino blanco y deja que reduzca durante 5 minutos. Incorpora la zanahoria y los guisantes y deja que se cocinen durante cinco minutos.
- Vuelca todo el contenido de la sartén en el slow cooker, coloca el tomillo y el laurel sobre la carne y cocina entre 5 y 7 horas en BAJA.
- El tiempo es orientativo y depende del tipo de carne y de la potencia de la Crock Pot que utilices. Comprueba el punto de la carne pasadas las cinco horas y media. La carne deberá estar tierna, melosa y deshacerse con facilidad al presionar con un tenedor. Si no es así, deja que se cocine por más tiempo hasta que alcance este punto.
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